VANDALISMO EN FMAT

recibí un correo de Esmeralda Durán, Nuestra Consejera Alumna, y la verdad me indigna lo que leí, como puede ser posible que estemos perdiendo nuestro tiempo destruyendo las cosas que en si pertenecen a todos, recordemos que estamos en una institucción de educción pública, yo he echo algo de deporte y creo que en ocasiones me he emocionado pero no al grado de destruir mi equipo de entrenamiento o el de otros, bueno les dejo el mail para que jusguen ustedes mismos.

Vandalismo Universitario ¿“Orgullo” Fmat?
A toda la comunidad de la Facultad de Matemáticas.
El siguiente correo es para informarles sobre lo siguiente:
Hace menos de un año Consejo Estudiantil gestionó y donó a la Facultad de Matemáticas 3 mesas de ping pong con un costo de $1 900.00 cada una que da un total de $5 700.00 (cantidad que no es nada despreciable y además tomo su tiempo y esfuerzo gestionar), estas mesas fueron entregadas ante la maestra Luci Torres y alumnos asistentes a la entrega de material y presentación de las selecciones fmat, y en el día del estudiante. Las mesas fueron resguardadas y registradas ante la secretaría administrativa, por lo que ahora forman parte del mobiliario de la Facultad. No son de Consejo Estudiantil son propiedad de Fmat y para el uso de sus miembros.
Las mesas fueron donadas por consejo para que los estudiantes puedan utilizarlas para su esparcimiento y para que la selección de tenis de mesa pueda realizar sus entrenamientos y nos representen en los juegos deportivos universitarios y otros torneos en los que participen.

Aunado a esto realicé la gestión ante la dirección para adecuar el espacio donde se encuentran las mesas, mientras esto concluía y se daba el permiso para remodelación y habilitación, los integrantes del grupo de Consejo Estudiantil dieron de su tiempo y esfuerzo para ir de manera periódica a limpiar este espacio (en fines de semana e incluso vacaciones) para que ustedes puedan jugar o practicar en las mejores condiciones posibles, recalco que esto está fuera de las responsabilidades del Consejero Alumno(para más información leer estatuto, ley orgánica y reglamento interior) y de su equipo de trabajo. Sin embargo, se hizo de corazón.

La mesa de billar
También se encuentra la mesa de billar la cual pertenece a la facultad, y que después del robo de los accesorios la iban a dar de baja para llevar a la bodega, les puedo informar que por la gestión que realicé, a finales de este mes se repararía y se comprarían los accesorios necesarios para habilitarla. Pero ante esta situación que se presenta dicho proceso se anula.
Todo el equipo que con esfuerzo se ha obtenido para ustedes es de ustedes y lo que esperaría es que por lo menos sea cuidado, somos universitarios y como tal creo que tenemos conciencia y somos responsables de nuestros actos.

Pero……………..
Que creen, ¿hay conciencia y responsabilidad? O es que hay quienes no actúan como personas maduras, o al menos como estudiantes, que cuiden los espacios que son para todos, y no solo para unos cuantos. A que voy con esto, si lo han notado (me imagino que si) de las tres mesas de ping pong, dos de ellas están totalmente destrozadas, y por lo que se ve no fue por el uso cotidiano sino por la ociosidad e inmadurez de ciertas personas, la otra mesa está en camino de que le pase lo mismo, y como les había dicho desde un principio ni un año ha pasado y están destruidas, no
crean que solo tengo que ir y decir que se rompieron y nos darán otras, esto no funciona así, sobre todo por cómo han sido tratadas.

Entiendo que no hay espacios en la Facultad para realizar otras actividades y que en su momento utilizan este espacio para otras cosas, pero el hecho de no tener el cuidado cuando mueven las mesas para realizar otras actividades es un factor que también ha provocado que se dañen. Cuidar lo que es suyo no cuesta nada, en cambio no cuidarlo nos ha costado quedarnos sin mesas entre otras cosas, repito, las mesas no son de Consejo, por lo que si alguien lo hizo como forma de atentar contra la figura del Consejero Alumno pues simplemente no funciona, contra lo único que atentan es contra su propia comunidad estudiantil.
Con todo esto solo les queda cuidar la última mesa que se tiene, si quieren seguir teniéndola. Con respecto al espacio: detuve el proceso para la remodelación y habilitación ya que no tienen caso si no se van a cuidar las cosas, por la mesa de billar (que está en el mismo camino de ser destruida) la van a llevar a la bodega.
Para aquellas personas que han ido al cubículo de Consejo exigiéndome que compre otras mesas, les quiero decir que no es mi responsabilidad ni mi obligación reponerlas, lo analizaría si se diera la situación de que las mesas se perdieron por el desgaste debido al uso y como una necesidad apremiante para los estudiantes, pero en este caso no es así y sobre todo por el cuidado que se les ha dado. (No crean que solo tengo que ir y decir que se rompieron y me darán dinero para comprar otras, esto no funciona así) yo no recibo dinero para las actividades que organizo, lo que hago es una gestión ante las autoridades(lo cual lleva su tiempo y su labor de convencimiento, justificación, argumentación, presupuestos, etc.) y cuando las actividades son aprobadas, junto con el monto acordado para dicha actividad, entonces trato con los proveedores de la uady y es a través de la misma que es como se les paga por los bienes o servicios, a través de un crédito el cual debe ser comprobado por la correspondiente facturación, o bien yo cubro de mi bolsa las necesidades propias de las actividades aprobadas y luego presento los comprobantes fiscales para el posterior reembolso en aproximadamente un mes después, siempre y cuando no exceda el presupuesto previamente aprobado, por mis manos nunca pasa dinero alguno, al contrario yo pongo de mi dinero, por eso es una gestión y no una administración, y les comento que las adquisiciones que por gestión realiza consejo son dadas de alta como propiedad de la facultad.
Agradezco a todas aquellas personas que si han cuidado y mantenido en buen estado los espacios y el mobiliario de su Facultad (incluyendo las mesas de afuera de la cafetería) y para los que no lo han hecho espero que reflexionen y que se den cuenta que ésta es su segunda casa y la educación que demuestran con el trato que le dan a los bienes muebles e inmuebles de esta escuela es seguramente el reflejo de la educación que han recibido; comprendo que para algunos de ustedes el tener una actitud agresiva e irreverente es reflejo de su desesperación por no poder o querer enfrentar su problemática académica o personal, o simplemente una forma de querer llamar la atención de sus compañeros, debido a su incapacidad de adaptación ante el ritmo que la facultad impone o algún otro problema, la verdad no sé, lo que si les sugiero es que antes de afectar a los demás tomen sus problemas con responsabilidad y si tienen mucha ira atrapada pues en vez de destruir el mobiliario de la facultad, mejor vayan al departamento de orientación y consejo educativo ahí les podrían ayudar o bien practiquen un deporte, el Karate es un buen ejercicio para canalizar la ira y el estrés al mismo tiempo te da disciplina.
Para finalizar quiero informarles que turné una queja ante la Secretaría Administrativa de esta facultad, y se tomarán las medidas necesarias para evitar el deterioro de las instalaciones y mobiliario de nuestra Facultad, incluyendo la sanción administrativa correspondiente para quien sea sorprendido destruyendo propiedad de la facultad.
Como Consejera Alumna, esta situación es algo que me angustia, porque no esperaba que en una institución superior pasaran estas cosas, pero como ven suceden y pues es mi deber hacer notar lo que ocurre (así como es deber de todo universitario hacerlo) espero que haya el suficiente criterio para entender que, aun que para muchos la destrucción de dos mesas de ping pong no es motivo de alarma, el acto de destruir la propiedad de todos (o de otros) es en sí lo que verdaderamente resulta alarmante.